Las características y peculiaridades de la piel de cuello y escote hacen que esta delicada zona sea una de las primeras en mostrar unos signos de envejecimiento muy específicos. Para combatirlos, primero debemos tomar conciencia de todas las necesidades de este punto concreto de nuestro cuerpo. ¿Sabes por qué esta área envejece prematuramente? Descúbrelo para dedicarle la atención que se merece.
ANATOMÍA DEL CUELLO
Debido a su posición clave, el cuello – y más concretamente sus 26 músculos– está implicado en múltiples funciones que realizamos a diario, como la estabilización de la cabeza, la respiración o la masticación. Este movimiento constante de los músculos afecta a estructuras como la piel, que con el tiempo y la repetición puede transformarse en arrugas o flacidez.
PARTICULARIDADES DE ESTA PIEL
Por un lado, la piel de esta zona es mucho más delgada y fina que la del rostro, esto se traduce en que es más frágil y menos resistente a las agresiones externas, y además con la edad va perdiendo grosor. Por otro lado, en esta área tenemos menos glándulas sebáceas, esenciales para mantener la hidratación natural de la piel. Por último, y no menos importante, en cuello y escote tenemos menos fibras de colágeno y elastina, que aseguran la firmeza y flexibilidad de la piel.
¿POR QUÉ CUELLO Y ESCOTE ENVEJECEN PREMATURAMENTE?
Además de las particularidades de esta piel, con la edad se da una pérdida de volumen óseo. Esto afecta a pómulos, barbilla y línea de la barbilla e incide en el aspecto del cuello, ya que el hueso se contrae y la musculatura se relaja, agravando el efecto de la gravedad e incrementando el descolgamiento de la zona. Otro factor relevante es que el cuello y escote es una de las áreas más expuesta a las agresiones externas, sobre todo a la radiación solar, lo que acelera la formación de los signos de la edad.
¿Sabías que además tus hábitos y gestos diarios también influyen en el envejecimiento de cuello y escote? Nuestras expertas nos explican cómo evitarlo aquí.